El Rastro Oculto

Tres cosas me son ocultas; Aun tampoco sé la cuarta: El rastro del águila en el aire; El rastro de la culebra sobre la peña; El rastro de la nave en medio de la mar; Y el rastro del hombre en la moza.

Proverbios 30:18,19.

En este pasaje de Proverbios, encontramos  algo que nos invita a la contemplación profunda de las maravillas de la creación y la sabiduría divina. El autor menciona tres cosas que son demasiado maravillosas para él, y una de ellas es el camino del águila en el cielo. Aquí, se nos recuerda que hay aspectos de la vida y de Dios que superan nuestra comprensión. A menudo, nos encontramos con situaciones que no podemos explicar, pero en esos momentos, debemos recordar que estamos ante un Dios que es infinitamente sabio y poderoso. El aguila es movido por su instinto y aunque parece sin sentido tiene un objetivo y un proposito, gracias a su genetica el aguila puede cazar a su presa y tener pocas probabilidades de fallar. Dios lo ha diseñado de tal forma que sea formidable de acuerdo a su diseño. 

El versículo menciona el camino de la serpiente en la roca. La serpiente, un símbolo de astucia y sigilo, nos enseña sobre la sabiduría que se mueve en silencio y con propósito. En nuestra vida diaria, debemos aprender a ser astutos como las serpientes, discerniendo los caminos que Dios ha trazado para nosotros.La palabra nos indica tener la sabiduría y astucia de la serpiente y la mansedumbre de la paloma. La serpiente posee uno de los diseños mas interesantes de la creación ella puede perseguir a su presa aunque esta vaye a gran velocida su lengua puede distinguir una particula entre un millon en el aire y detectar el rumbo que tomo su presa, posee una vision que detecta el calor y sabe donde estas las venas o alterias de la presa para inyectar su veneno y todo esto en fracciones de segunfos. A veces nos dejamos llevar por nuestras emociones, rabias, dudas, miedos y tristezas porque solo vemos lo inmediato, pero la sabiduria que viene de lo alto no se altera por las circunstancias y sabe discernir los tiempos, con su lengua adoradora al percibir las bendiciones que vienen entre muchas adversidades. A veces, la sabiduría divina nos llevará por senderos inesperados, pero siempre estarán alineados con Su propósito. 

También, se menciona el camino del barco en medio del mar. Este símbolo nos recuerda la grandeza de los planes de Dios y cómo, a pesar de las tormentas y las olas de la vida, el barco es guiado por un capitan experto que conoce los mapas oceanicos, las rutas maritimas y el tiempo de las tormentas pero tambien las rutas de aguas mansas, cuando hacemos del Señor nuestro capitan, podemos estar segurisby confiados dejemos que Él lleve el control absoluto. La fe en Dios nos permite navegar por las aguas turbulentas con confianza, sabiendo que Él es nuestro capitán. Así como un barco necesita un timón para dirigir su curso, nosotros necesitamos la guía del Espíritu Santo para navegar nuestras propias vidas. 

 Reconozcamos la grandeza de Dios y  que hay mucho más en la vida de lo que podemos entender. Al enfrentar lo desconocido, recordemos que Su sabiduría es perfecta y Su amor inagotable. Que cada día busquemos conocerle más y caminar con fe en los caminos que Él ha preparado para nosotros. 

 Oración

Amado Dios, Te agradezco por las maravillas de Tu creación que nos rodean y por la sabiduría que has compartido con nosotros. Reconozco que hay cosas en esta vida que son demasiado maravillosas para mi entendimiento, como el camino del águila en el cielo. Ayúdame a confiar en Tu plan, incluso cuando no puedo ver el panorama completo.

Te pido que me concedas la astucia y la sabiduría, para que pueda discernir Tu voluntad en cada situación. Guíame a caminar con sabiduría y propósito, sabiendo que cada paso que doy está alineado con Tu designio perfecto.

También, Señor, te agradezco por ser mi capitán en medio de las tormentas de la vida. Cuando enfrento desafíos y dificultades, ayúdame a recordar que Tú tienes el control absoluto. Que pueda navegar con fe y confianza, sabiendo que estás conmigo en cada momento.

Te busco, Señor, y deseo conocerte más cada día. Llena mi corazón de asombro ante Tu grandeza y enséñame a caminar en los caminos que has preparado para mí.

En el nombre de Jesús, amén.